
-Soy la mujer vampiro -dijo la chica.
Me reí.
-Ya estoy viejo para que me anden con cuentos.
-¿No me crees?
Me enseñó los colmillos.
Antes de darme cuenta, ya los tenía clavados en el cuello.
Di un grito. Desperté.
---
Creo que por ver Crepúsculo ando soñando estas cosas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario