De Rosario Cardeña Tintaya, novela ganadora del Premio Cámara Peruana del Libro. Para quien ha leído magistrales novelas breves como los clásicos "El viejo y el mar" y "La metamorfosis" pasando por "Carlota Fainnber", "En ausencia de Blanca", "El dueño del secreto" de Antonio Múñoz Molina y "Este domingo" y "El lugar sin límites" de José Donoso, y todas las novelas breves de Álvaro Mutis y las de Mario Bellatin, y el clásico de clásicos "Pedro Páramo", entre otras, la verdad que esta novela deja mucho que desear. Uno lee el prólogo de Alonso Cueto -uno de los mejores escritores peruanos después de Vargas Llosa- y piensa carajo, voy a leer una buena novela, mejor que la ganadora del año pasado, y se lleva un chasco. Quizá la han premiado por la "originalidad" del tema: un amante imaginario, o porque en el pasado de la protagonista le dan duro a los maestros, darles duro al Sutep está de moda, pero no por otra cosa. ¿Será que las vacas sagradas de nuestra literatura temen la irrupción de un Vargas Llosa que les haga sombra y se curan en salud premiando novelas que no trascenderás? No sé. No creo que relea esta novela en muchos años. O termine en algún rincón donde se cubrirá de polvo y se la comerán las polillas.
Y no crean que escribo así porque perdí este concurso. Este año no participé. Sé cuáles son mis limitaciones, así que así nomás no participo en los concursos nacionales. Espero hacerlo el otro año con la novela que estoy escribiendo ahora sobre la historia de mi viejo.
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