Hoy una colega me decía Ella tiene su enamorado, cada rato la llama. Como si Ella me importara. La colega no sabe que soy un depradador, que he vivido la vida con intensidad, que no soy ningún imbécil, qué, si me lo propongo, puedo hacer que Ella "muera" por mí como la Chola o como la Fea, pero bueno, ya no estoy para estar perdiendo mi tiempo en esos asuntos del corazón, así como estoy ando feliz, además, estoy escribiendo una buena novela que me tomará sus buenos años y todos mis pensamientos, mis deseos, mis lecturas, cada minuto de mi vida está puesta en esa novela y no puedo pensar en otra cosa más que en ella, o sea la novela. Esta es la segunda versión. Recuerdo que estaba tan obsesionado con el personaje de mi historia que solo pensaba en ella, soñaba con ella, estaba enamorado de ella, no de Ella, que estará un año y después se irá y será como si nunca hubiera existido. ¿Quién se acuerda ahora de V, de E, de S? Nadie, ya casi nadie menciona a la Fea, y eso que su recuerdo está fresco. Somos ave de paso. Creo que me fui por las ramas. Decía que ando concentrado en mi novela que no puedo pensar en nada más. Pero en fin. La historia acaba acá, o el día en que la colega se trague sus palabras. Ya saben que más sabe el diablo...
No hay comentarios:
Publicar un comentario