Los amigos

Tengo un par de amigos, uno de ellos es Chanca -así lo llamo yo- con quien tengo una amistad de 17 años. Nos conocimos en la universidad, ahora trabajamos y nos encontramos de vez en cuando como hoy, en que me vino a visitar y salimos a tomarnos una negrita, un cafecito y una amburguesa, de vez en cuando es un vino y un chifa. Cada uno pone lo suyo, aunque siempre le hago trampa y él es el que pone más, jaja, digamos que a veces me siento en el Olimpo y los demás me tienen que rendir pleitesía, jaja. También tengo otro amigo de muchos años, deben ser veinte o más, desde segundo de secundaria. Pero esta amistad no es verdadera, hace un par de años le presté un dinero de un concurso literario que gané, recuerdo que durante una semana me estuvo acosando por el préstamo, que hasta ahora no me lo devuelve. Antes venía a buscarme siempre los domingos y salíamos a chatear, desde el préstamo viene de vez en cuando, la última vez se apareció después de cuatro meses y seguía con el mismo cuento de cuándo ponemos un negocio, que necesita un capital, que a ver si un día salimos y nos tomamos una cervecita, etc. Yo digo si no me paga lo que le presté, ¿es tan imbécil que piensa que voy a hacer negocios con él? Pobre tonto, en fin, no le digo nada, pero ya estoy planificando lo que le diré la siguiente vez que venga a buscarme, si es que lo hace, y si no lo hace, tampoco me importa mucho. He allí dos ejemplos de amistad, de amigos.