Fue el único libro que llevé a mi viaje a Ayacucho, así que lo leí un par de veces. Magistral Cueto, aunque algunos cuentos, como "¿Me presta su cocina?", no me gustan nada, igual que "Adopción", pero otros como "Una ventana encendida" y "Un arcángel llamado Gabriel" los leí y releí con deleite. El cuento que da título al volumen también es interesante, aunque no es tan logrado que digamos, si lo leemos desde el punto de vista de una persona que ha padecido los rigores de la guerra interna y sus mecanismos de captación de adeptos. Pero siempre es bueno leer a Alonso Cueto y, en líneas generales, me gusta este volumen donde el lenguaje de nuestro autor se hace más llano, hay diálogos, descripciones.
Alonso Cueto es uno de mis héroes literarios y quienes despotrican de él son los que lo envidian, los que no han alcanzado los logros de uno de los escritores peruanos más interesantes de los últimos años.
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